martes, 13 de enero de 2009

Acritud

En tanto que la ciudad se empeñe en repetir
en modalidad de cinta sinfín
todos esos oscuros, pérfidos defectos
que hacen a su maltrecha naturaleza;
en tanto que ella me ignore con voluntariosa actitud
y no deje ni un mínimo espacio a mi expresión
de nada en general y de todo mi particular;
en tanto que aquellos que habitamos esta ciudad
no volemos los prejuicios, no dinamitemos los miedos,
no erradiquemos al virus del menosprecio,
en tanto nos sigamos manejando con hipocresía
a la hora de llenar el sobre con nuestra opinión,
en tanto sigamos siendo prisioneros,
seguiremos pagando deudas que no disfrutamos,
comprando comestibles que no alimentan
y votando representantes políticos que no nos representan,
que no trabajan para el pueblo.

4 comentarios:

  1. Casi todas las ciudades son iguales... pero esta es la execpción!!!

    Besos!

    ResponderEliminar
  2. carajo, cuánta razón tenés.
    Hete aquí un dilema, porque las ciudades en si no existen, están hechas de personas y solo eso. (si leiste las ciudades invisibles lo sabrás). Cómo hacemos? ademas de la aplanadora y la dinamita..claro... =P

    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Conta, nunca aclaraste si la diferencia era buena o pésima... Je!
    Le pongo pila pero viste como es la política, aprobás un impuesto para algunos y se quejan muchos...
    Lo bueno es que tengo la reelección asegurada!
    Besos!


    Luna, no quiero ser plagiario pero fijate en los noticieros, los muchachos de israel tienen buenas ideas...
    Las personas es lo que vale, más allá de donde se asienten y el odio nunca lleva a buen fin, eso está claro.
    Y de última, un poco de la propia medicina para dejar claro que así las cosas, no se hacen.
    Besos!

    ResponderEliminar

Mesa de entrada: aqui se recepcionan las consultas, quejas, solicitudes y reclamos. Le daremos un número de legajo y... paciencia! Es municipal, vió?