domingo, 24 de enero de 2010

Literatura, ficción y más ciudades [11]

Primeras impresiones de Londres

"Cuando llegué a Londres en 1946, la hallé que se parecía a Bucarest con vestigios del pasado: montañas de escombros, gente extenuada y vencida por la guerra, con aspecto de hurones y engañados con la retórica de Churchill, que iban dando tumbos por un yermo de pobreza, libretas de racionamiento y una división social grotesca.
Para comprender Londres hay que entender el hecho de que en esta ciudad, como en ninguna otra parte del mundo, la Segunda Guerra Mundial no ha terminado. Los tránsfugas de antaño ahora tienen comercios y restaurantes y un ejército de ocupación compuesto de banqueros internacionales y turistas con tarjetas de platino ha reemplazado a los militares norteamericanos. La gente es estoica y mal pagada, con un nivel de vida más bajo y servicios peores que los de cualquier otra capital de Occidente. La fatigada camaradería de los ataques aéreos le da cohesión al todo. Las bombas deberían caer esta noche pero es probable que no lo hagan, aunque se tiene la sensación de que la gente las recibiría bien.
¿Cómo mejorar Londres? Lanzando un programa intensivo para llenar la ciudad de canales piratas de televisión, clubes nocturnos, burdeles y salones porno. Londres tiene que volverse tan decadente como lo fue Berlín en la república de Weimar. En lugar de eso, no es sino una Bournemouth decadente."
Revista Time Out - 1993

Guía del usuario para el nuevo milenio - J. G. BALLARD

10 comentarios:

  1. La parte oscura de Londres... la sombre que a menudo no nos muestran, sucumbida por el "London bridge"...

    Un beso, con gotitas de agua!

    ResponderEliminar
  2. Ermmmm... amo Londres! Me gustó este extracto, me hizo traer recuerdos del viaje :D

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Para ser el autor de Crash, del Imperio del Sol, el Mundo sumergido y otros, nos muestra su estilo tan poco "sociable" para con los lectores. Lo mejor de todo es q' lo visto y pensado por el con 16 años, se cumplió en buena parte.

    Mis saludos Intendente :)

    ResponderEliminar
  4. Que perspectiva tan aguda y clara acerca de còmo mejorar una ciudad...

    Pero Londres no lo era ni lo es todo,o si??

    P.D.:Me pregunto què pensarà del contexto a nivel paìs este señor...

    BESITOS MAÑANEROS

    ResponderEliminar
  5. Claro había comenzado el fin de un Imperio, de repente se dieron cuenta que el no solo eran los escombros de las bombas sino que ellos no iban a volver a ser los mismos.

    Por mi que se jodan

    ResponderEliminar
  6. Lucía, yo estoy convencido que hasta en la más aparentemente perfecta sociedad, hay un componente rebelde que generará un colapso (o aunque sea una pequeña crisis) del sistema.
    Otro beso, con gotitas de miel!!

    Conta, yo no lo amo porque no lo conzoco!! Ya voy a tener una oportunidad!!
    Besos!!

    Artus, estoy de acuerdo, aunque el formato columna de revista es un pelito más "sociable", como decís vos...
    Es mezcla de ficción, de futurología y de impresiones personales!
    Abrazos!!

    GABU, las ciudades (todas en este mundo) se podrían mejorar con muy pequeñas cosas y tan poco esfuerzo! Londres no es ni el comienzo del todo, es solamente una ciudad más.
    No sé lo que pensará ahora pero es frondosa la bibliografía propia y ajena que habla sobre su pensamiento.
    Besos de almuerzo!!

    Lux, es cierto que eran los escombros de un imperio pero de esos escombros reconstruyeron algo que es mucho mejor que aquello...
    A mi parecer no se jodieron, nos jodieron...
    Abrazos!!

    ResponderEliminar
  7. ¡La leche! Y yo que siempre pensé que el imperio de la Corona sabía protegerse muy bien.
    Entre tanto desbarajuste podría perderme un rato entre la niebla y degollar a unos cuantos.
    Rafa The Ripper.

    ResponderEliminar
  8. Se va a postular como intendente de Londres?

    ResponderEliminar
  9. Observador de los buenos y consejero de los mejores, jajaja, me hizo gracia el final.
    Sin embargo, creo que la diferencia entre paises más serios (por decirlo de algún modo) y los que no; no es la capacidad de hacer que tengan unos y otros, porque muchas veces es la misma, sino que los primeros tienen una capacidad de recuperación impresionante y los segundos no.
    Algo muy parecido pasa con las personas: no es tan dificil ser existoso, como caer y volver a levantarse.
    Si a cualquier ciudad argentina le hubiera pasado lo que a Londres, Varsovia o cualquier ciudad eurpea atacada durante la 2º guerra, todavía estaríamos viviendo en containers.

    ResponderEliminar
  10. Rafa, tal vez el poder de protegerse no es precisamente el que no le pase nada, sino el poder sobrevivir a una catástrofe.
    Si querés, saciate de sangre, pero eso sí, bancate el largo brazo de la ley (?)!!
    Abrazos!!

    Mate, no lo había pensado... Aunque a mi me gusta la lluvia, no la humedad, el continente, no una isla y los latinos, no los anglosajones. Aparte, no sabría qué hacer con tanta estructuración...
    Besos!!

    Lola, si él es un gran observador, vos no te quedás atrás; es muy aguda y lastimosamente cierta tu acotación: mi container sería de color gris con letras azules...
    Aunque tenemos una gran imaginación y creatividad, creo que podríamos superar algo similar; lo que lo retrasaría o haría fracasar sería el individualismo que nos atenaza el criterio.
    Besos!!

    ResponderEliminar

Mesa de entrada: aqui se recepcionan las consultas, quejas, solicitudes y reclamos. Le daremos un número de legajo y... paciencia! Es municipal, vió?