Tratar de buscar y en efecto encontrar un elemento que sirva para satisfacer alguna necesidad que crece incontrolable en medio de nuestro pecho tal vez no solucione del todo el problema, tal vez incluso origine un nuevo estado de pasajera, falsa alegría.
Pero a fin de cuentas necesitamos esas pequeñas, diminutas islas de placer para continuar con la cabeza en alto y no aflojar a mitad de camino.
Hay también una posibilidad que esta volátil felicidad deba ser compartida por algún otro personaje que muy probablemente se haga partícipe él mismo de nuestro sentimiento y lo haga propio multiplicando el efecto motivador.
Y si naufragamos en la escasez y la fugacidad del bondadoso efecto reparador no quedará otra opción que entrecerrar los ojos para evitar que la arena nos hiera, ahuecar los brazos en busca de calor y encasquetar bien fuerte el sombrero y seguir con la mirada al frente, sin mirar atrás.
De solo leer sobre esas pequeñas alegrías se me levanta el ánimo.
ResponderEliminarTal vez sean más modestas que otras alegrías, pero siempre (siempre, siempre, siempre) podemos aspirar a ellas.
En cuanto a los personajes no sé... en general los que se alegran con nosotros no son indeseables, y como decían algún refrán "una alegría compartida es doble alegría, y una pena compartida es media pena"... pero bueno, en otras circunstancias las cosas cambian...
Besos!
Creo que en realidad esta vida que nos has ofrecido es una vida muy concreta, definida y exacta. Una vida modélica a la que seguir a pies juntillas o firmemente.
ResponderEliminarTambién me gustó esta óptica tan optimista :))
un abrazo
Lola, supongo que la "intención" de quien se acerca influye mucho en cómo se interpreta ese compartir la alegría, por supuesto que no hay que ir recelando por la vida, pero hay mucho interesado rondando por ahí...
ResponderEliminarEstamos rodeados de pequeñas alegrías, es cuestión de abrir los ojos, apuesto que MC te regala un promedio de mil de ésas alegrías por día!!
Besos!!
Esil, hubo una época oscura en mi vida en la que todo estaba mal, todo era bastante depre y lo escrito después de eso transpira optimismo, por eso cada palabra que escribo es una ofrenda a la vida.
Besos!!
Me ha encantado eso de encasquetar fuerte el sonmbreo y ala palante...
ResponderEliminarUn abrazo.
MJR, es que acá sopla mucho viento y fuerte y todo el tiempo y si no nos ajustamos el sombrero lo tenemos que ir a buscar a la loma!!
ResponderEliminarSaludos!!
Yo diría que se trata de un texto con las bolas bien puestas, me gustó, así debe enfrentarse la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
HD
Así es la vida. La de cualquiera. No importa donde estén o cuanto lo disimulen o pretendan ignorarlo o evitarlo. Bien por ud y su escrito!
ResponderEliminarYa sabe, paso cuando me dejan jajaj
A b r a z o!
Sí, me gusta mucho como lo planteás, aveces toca caminar al frente si mirar al frente. Con los ojos que se cierran para observar mejor la sensación de caminar y no el camino abarcado.
ResponderEliminar¡Qué visión la tuya!
Un abrazo, amigo. Chévere la entrada.
F:
Me gusta eso de encasquetar el sombrero.
ResponderEliminarJe.
Beso!
Humberto, más que eso, al escribirlo puse sobre la mesa, sin esconder nada, todo lo que sentía.
ResponderEliminarAbrazos!!
Dany, me gusta lo de "así es la vida", es general y particular, engloba lo de todo el mundo y lo individual.
Pase cuando pueda, yo también escribo cuando me dejan!! Jajaja!
Abrazos!!
Felipe, avanzar, aún lentamente, aunque sea a la rastra, despacio. La cuestión es no detenerse...
Abrazos!!
Verónica, es que acá el viento sopla fuerte y esos accesorios tienden a volarse! Jaja!
Besos!!
Cuestión de no convertirnos en estatuas de sal, no vale la pena.
ResponderEliminary beso!
cualquier estratagema es válida para no claudicar ante los repechotes del camino
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